Unos cuantos bemoles…sostenidos…compases de cuatro…en andante…un vals…un par de manos entrelazadas…un par de corazones bailando en la bóveda celeste…nubes de algodón…¿puedes sentir los colores? Puedo probar tu aroma…En mis venas corre…mientras, me reflejo en tus ojos y tu desnudas mi alma con tu mirada…un beso infinito…un chasquido como un sueño…cristal y acero…percusiones dan ritmo, cuatro cuerdas dan la figura…y la voz de un ángel resuena en un camino de estrellas…como un suspiro…y dos supernovas se funden en una sola…el sistema perfecto…

El auto seguía su andar mientras el cielo nos miraba con sus miles de ojos...atentos...la oscuridad se cubrió de plata...y un mar de asfalto nos faltaba por cruzar para llegar a casa... Susurros distantes y memorias de una vida pasada que se proyectaba de forma intangible pero visible en forma y sonido, diálogos con personajes de los cuales perdí contacto hace más de una década...Los fonogramas llenaban el cuarto...la triste melodía de fondo indicaba la llegada del alba y su consecuente adiós...buena suerte ruiseñor...el canto del colibrí...en mi buzón una carta que indica un destinatario pero no un remitente...abre los ojos...las letras forman palabras, las palabras frases...y las frases dan forma a los párrafos que no entiendo por más que intento. Su leguaje me es conocido...no es música, tampoco viento…Vino tinto de Almaraz, un cigarrillo, una pluma y un tintero...de pronto tomo una hoja y escribo... ¿como sabré que es para quien es? -no te preocupes- susurra la luna -estás redactando con tinta de amor-

DNLA

una mirada de diamante, sus ojos marrones lo hechizan todo a su paso...la verdad del universo, se oculta detrás de su belleza, y el secreto de la vida se esconde en tus ojos de cristal...

Vi pasar tu sombra a la orilla de mi cama, fantasma de una ilusión pasajera, cual estrella fugaz. Pidiendo un deseo por la ventana, pidiendo felicidad. Años atrás deseando, años atrás esperando. Y ahora se acumulan los días y las horas, y sigues en ese mundo, pintado de colores inexistentes, perfectos. De pronto desperté y vi que no eras tú. Las manos vacías me reclaman, y el olor a incertidumbre llena la habitación. El frió de la soledad cubrió tarde. Y la noche se tiño de rojo.

Escribí algo para ti...algo pequeño…una insignia en una piedra…un crepúsculo..una noche…sonrisas angelicales se encuentran y se funden creando supernovas..planetas azules…una mirada de estrella…radiante constelación se forma en tus ojos negros como la noche..un reflejo en un estrecho arrollo. Peces de colores se confunden en las aguas de tu alma…un sonido lejano reclama el dulce sabor de tu voz…las doce a.m. y el tiempo se detiene mientras el universo se expande más rápido que la velocidad de la luz…un cometa hechizado me guía con paso lento…la desesperación me invade y el turno de la alegría al bate apenas inicia…sueños…materia etérea que impalpable y sólida a la vez, realidades…dimensiones alternas, decisiones que marcan la línea de la vida y la muerte…un paso..dos pasos, un pie tras otro pie…tu mano entre la mía, mi corazón en tus latidos…un beso…un querer…y un amor…

Por fin entendí…

...Y todo lo que nunca fue…y lo que no dejamos ser…tratamos de taparlo con un dedo….

loco...

Durmiendo entre pensamientos, sueños vacíos, pesadillas. Este lugar me tiene atado, mi mente se pierde entre las lámparas y el espacio suave, blanco. Cada que regreso solo quiero salir. Mordidas de un animal me calman, me atontan, me hacen volar. Y soy tan ligero, puedo ir a dondequiera con solo decir.



Tuve una idea…yo me quedaré contigo si tu te quedas tatuada en mi corazón…

Tranquilo en el lago aguamarina, entrada de leones de cobre, un domo refleja la luz de tres soles en el horizonte. Mientras, la selva se llena de cantos de aves, sinfonías compuestas por la naturaleza, suaves notas que bañan las copas de los árboles. El lago, agua infestada de vida, con peces demonio, medusas, y un sin fin de seres acuáticos tan bellos como la imaginación puede crearlos. Siguiendo un astro en el firmamento, sus colores recuerdan el calor de un beso en invierno. Un mundo pequeño, rodeado de una atmósfera dulce, sabor carmesí. El ritmo de un tambor, el siseo de un insecto que intenta acercase lentamente a mí. Mientras todo regresa a su olor normal, la cabeza da vueltas y las ansias de sentir su fuerza corriendo entre mi sistema comienzan. De pronto un corto circuito, las nauseas del ser, del estar. Una vez más te necesito y una vez más no estas. Tiemblo. El dolor empieza y termina, cada tiempo que has estado aquí. Enganchado a tí...

Sentir...respirarte otra vez....

Un turno, Pequeñas gotas de luz motean el cielo, sus destellos entran por la ventana. Es media noche. El insomnio me hizo presa fácil. Entre azares y el olor de la cera derretida. Miles de velas se han apagado. Siempre estando aquí, siempre soñando. La tranquilidad del corazón es palpable, puedo sentir sus latidos a través de mi piel. Un espejo, tus ojos, me dicen que me vuelvo más viejo. Apenas ayer desperté temprano para ir a mi primera clase en el kinder, y hoy me levante con una barba de 3 días y dos décadas y cacho después. Dicen que el tiempo es relativo, se detiene a la velocidad de la luz. Mi línea de vida es como un campo minado lleno de hoyos. Cosas que no he vivido. Cosas que no viviré, y cosas que no quiero vivir solo. Un nuevo año comienza. Y como siempre, el inicio es lo más fácil. Lo difícil es aguantar la pesadez de la pendiente cuando vas cuenta arriba. Abrí mis puertas hace un rato, estabas allí... Un aVril en invierno. Como un ángel vestido de negro. Con tus ojos oscuros y tu voz dulce. Los balbuceos de una vida que apenas inicia y que no tiene comprensión de su alrededor, pero que pronto empezará a preguntar. Si la gente pudiera abrir los ojos de vez en cuando seria feliz. Mientras unos me despojan de mis bienes materiales con el fuego entre sus manos, hay algo que aún conservo. Mi alma…para ti…para ella…pero si no lo ves…todo habrá sido en vano.

Sentado en mi habitación, mirando hacia las estrellas…